fue una competencia de clavados

La tremenda selección francesa de fútbol se enfrentó a la compañía de teatro de felipao, y como el duelo no era de monólogos ni de sobreactuaciones, ganó la orquesta de Domenech.
El partido se decidió tras una clara falta penal de Ricardo Carvalho en contra de Henry que Zidane definió como el maestro que es.
Por lo general, penal significa gol, así lo ve todo el mundo y es por eso que si la pelota no infla la malla del arco, se revienta al que chuta y se idolatra al que lo ataja, si es que lo ataja. Pero la cosa no es tan así cuando está Ricardo en frente, el arquero portugués que debe ser el mejor atajador de penales del mundo. Ricardo espera hasta el último minuto, lee al chuteador y siempre termina sabiendo exactamente para donde va el penal, así que la única manera de cambiar el penal por gol contra el meta luso es colocando la pelota en un rincón inalcanzable. Esto lo tenía clarísimo el mejor jugador del mundo, don messieur lord Zidane, que tomo 2 pasos de vuelo, los caminó y puso la pelota fuerte, abajo y esquinadísima contra el palo derecho del arquero, Ricardo obviamente se tiró bien, y cuando la pelota iba entrando el arquero estaba estirado al máximo y casi, casi la pellizca, pero Zizou, que de fútbol lo sabe todo, hizo imposible con su tiro que el tremendo portero luso se ganara los aplausos una vez más.
Cuando la pelota entró, infló la malla, y su equipo se adelantó en el marcador, el 10 francés respiró aliviado, sabiendo que ya estaba todo hecho, y le agradeció a Alá por dejarlo meter el gol, y yo le agradecí a Alá por Zidane.
Tras el 1 a 0 no había nada más que hacer, los portugueses se entramparon en piscinazos y reclamos injustificados, claramente impulsados por el director teatral que tienen en el banco. Me dio esa impresión sobre todo por que cuando Carvalho hizo el penal no reclamo nada, pero cuando iba a empezar el segundo tiempo le fue a hablar a Larrionda haciendo los gestos internacionales del piscinazo... Reclama weon, reclámalo todo!, aunque le rompai la rodilla de un mordisco a Zidane, reclama que esta piscineando!... algo así me tinca que fue el discurso de Felipao en el entretiempo.
Y así transcurrió un segundo tiempo donde lo único que podía salvar a Portugal era que el arbitro les comprara un piscinazo y les cobrara un penal o un posible cagazo de Barthez, lo que ocurrió, pero como el meta goza de la bendición de los dioses del arco, se rajó de que se la embocaran... tiene tanta cuea que no se entiende. Me imagino que por eso el astrólogo Domenech lo tiene de titular, por su buena estrella.
En la final están los 2 mejores equipos del mundial, y me tinca que vamos a presenciar uno de esos partidos antológicos, que se repiten y de los que se habla por siempre, es una final de mundial, obvio que sólo por eso será eternamente comentada, pero además me tinca que va a ser uno de esos partidos onda Alemania-Italia del 70, ojalá no lo este mufando. Toco madera.


Deportes Futbol alemania2006