No todo el fútbol ocurre en la cancha

Los goles perdidos en un arco se hacen en el otro... y así no más fue... en el primer tiempo la católica mostró despliegue, ganas, fútbol... probó de todas las formas posibles los guantes de Bravo, intento combinar por fuera y por dentro. Miranda, en un hecho histórico, se comió la banda derecha. Fabbro jugó en 30 minutos todo lo que no ha jugado en 5 partidos. Núñez... bueno, se comió un gol... hay cosas que no cambian. Como por ejemplo el ratonismo de Pellicer, que tras terminar el primer tiempo 1 a 0 optó por “tenerle la pelota a la unión”, se cachaba por todas partes, el equipo no salió ni con la mitad de la actitud que tuvo durante los primeros 45’... no puede ser, está bien que la unión no hile una jugada, pero el weon tiene que tener presente que Neira se puso a hacer goles para distraer su mente del hecho de que mientras juega su señora se lo está cagando... de más que pamelita pone el CDF y hecha al patas negras de turno apenas Manuelito se va a las duchas... lo tiene claro... los cuernos lo hacen un mejor jugador. No es un hecho aislado. En river, el coco Ameli se agarraba a la señora de Tuzzio por que consideraba que no daba lo mejor de si en la cancha... Ameli lo hizo por el equipo chemimare!.

La rabia roja.

En el entretiempo, fumando el descanso con unos amigos, presenciamos una cosa bastante rara, cuando volvió la unión a la cancha, desde una mancha roja chica y fea que había en la galera del frente, salieron disparados cientos de papeles, picado y del otro, extintores rojos y amarillos, fuegos artificiales, bengalas, tronadores, etc... fue lo que se hace comúnmente para las salidas, en partidos importantes... jamás había visto algo así en un entretiempo, y más encima iban perdiendo... rara la wea.
Igual no está demás aplaudir el espectáculo, tiraron harta parafernalia durante el partido los de la “red anger”... me dijieron que lo mejor fue la salida, pero no sabría decirlo, tristemente me la tuve que perder, la entrada al estadio era un caos.
A los habilidosos dirigentes hispanos se les ocurrió que con una sola boletería abierta bastaba, la brillante idea resulto en que a los 30 minutos del primer tiempo todavía seguía entrando gente. Yo llegue a las 5:20, me puse a la cola, y terminé entrando a las 6:10... na que ver po loco, nakenveker... cuando entre el partido llevaba casi 10 minutos y todavía quedaba media cuadra de grupos de gente esperando entrar. Un desastre.

Agricultura

Mientras hacia la cola para entrar al estadio, que fue un ejercicio de casi una hora, estuve escuchando las radios que transmiten fútbol, las típicas 3 que están más o menos juntas (91.7, 92.1 y 93.3) y me enteré de cómo le robaron el partido a Huachipato, donde para variar le cobraron un penal fantasma y le perdonaron un off-side al colo. La figura del partido fue matías Fernández, y el chiki no hizo un gol... Nada fuera de lo común, hasta que puse la agricultura y una voz bastante familiar, que resulto ser Luis Jara, introdujo a quién junto a él, iba a comentar el partido de la cato con la unión. Ni más ni menos que... JOAQUIN LAVIN!... rara la wea, por decirlo menos. O sea, ¿el lucho y el joaco comentando un partido de fútbol?, bueno, sabemos que son un par de tipos jugosos y polifacéticos, el primero canta, actúa y anima, y el otro es numerario, escribe libros de dieta, camina mucho y está obsesionado con ser presidente, pero creo que "comentaristas de fútbol" no será incluido en la lista de sus muchos “talentos”. no me convencieron como dupla, se alababan mucho uno al otro y se recordaban cosas, de repente son amigos, o por lo menos compartieron de todo las veces que playa-y-nieve Lavín fue a candidatearse a “mucho lucho”. Sea como sea, opte por cortar por lo sanó, así que cambié la estación y no pasé por ese dial hasta que me dejaron entrar al estadio, por que una vez adentro se apaga la radio y todo lo que pueda contaminar el militantismo irracional de estar en la barra. Obviamente.